jueves, 6 de marzo de 2014

¿Dónde está el dinero?


Hace unos meses, un gran amigo, compartió conmigo una reflexión que ha cambiado mi  manera de relacionarme con el dinero. Creo que Manolo desconocía el gran impacto que sus palabras iban a causar en mi manera de relacionarme con el dinero. Creo recordar, que su frase textual fue "El dinero está ahí para el que lo quiere, sólo hace falta que sepa ver dónde está". De alguna manera, me explicó que hay infinitas posibilidades de obtener dinero, sólo depende de qué pensemos nosotros con respecto al dinero. En ese mismo momento, empecé a buscar nuevas perspectivas sobre el dinero. Hasta ahora, consideraba que la única manera de vivir de manera holgada, era con un golpe de suerte, del tipo lotería. 
¿En serio voy a dejar que mi bonanza económica dependa de una estadística aleatoria? ¡Ni en broma! Yo soy creadora de mi realidad, y en función de lo que yo proyecto, así consigo lo que deseo. 
El proceso tuvo una serie de pasos, primero comprendí cuál era y había sido hasta el momento mi relación con el dinero, y descubrí que tenía connotaciones negativas sobre el. En este momento, considero el dinero como un fin necesario para conseguir determinadas cosas que me propongo, lo que he conseguido, es posicionarlo como aliado, y no como enemigo. 
Desde que mi sensación con el dinero ha cambiado, todo ha cambiado. Ahora me viene genial un proverbio hindú que dice "Nada ha cambiado, pero como yo he cambiado, todo ha cambiado".  Esta frase es uno de los descubrimientos que más ha cambiado mi vida. Si entendemos que todos necesitamos vivir en equilibrio, que formamos parte de una red, en el momento en el que hacemos cualquier cambio, por mínimo que nos parezca, el resto del sistema se reordena para volver a encontrar ese equilibrio. 

Por tanto, hoy os planteo un ejercicio:
1- ¿Qué es lo que pensáis del dinero?

2- ¿De qué maneras podéis obtener dinero? En este campo, abrir las opciones, no las limitéis a los rendimientos del trabajo, una herencia, la lotería, sed creativos y pensad que todo es posible, si queréis que lo sea.

3- ¿Para qué queréis el dinero?

Algo parecido, más extenso y personalizado, hacemos muchas veces en las sesiones de coaching, y os puedo asegurar que son muchas las personas que tienen una relación poco sana con el dinero y que consiguen posicionarse en el lugar que quieren gracias a una serie de herramientas que trabajamos en la sesión, que hacen que sea relación sea más sana.
Os animo a que tengáis la relación que mejor os parezca desde la conciencia, no vayáis en automático, porque quizá os estáis saboteando a diario. 

Estoy a vuestra disposición para aclarar las dudas que puedan surgir al respecto, podéis hacerlo por correo en tamaralosavan@gmail.com o en los comentarios de esta entrada, que contesto a diario.

Me encantaría que compartieses lo que escribo con aquellos que consideres puede interesarle, se trata de como decia Gandhi empezar por hacer el cambio que queremos en el mundo desde cada uno de nosotros. Por eso, yo comparto lo que me ha ayudado y creo que puede ayudar a otros.

¡Te deseo un día maravilloso!

RECUERDA:
¡El dinero está ahí, esperando a que lo cojas! 
¿Qué vas a hacer a partir de ahora? 
Te reto a que consigas el dinero que desees. 

Gracias por leerme y compartirme.
Un abrazo inmenso, 
Tamara 

2 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo contigo, generalmente tenemos una relación absolutamente insana con el dinero y los bienes materiales. Creemos que tener mucho de ambos nos va a hacer más felices. Y no es cierto, podrás comprar muchas cosas, viajar al fin del mundo, tener una criada que haga todo por ti.... Pero hasta que no te liberes de las cadenas que te atan a eso, no serás feliz. Hay que buscar la felicidad en las pequeñas cosas, esas que no valoramos hasta que las perdemos. Yo me di cuenta de esto cuando viví en Arabia Saudí, aprendí que me hacía más feliz salir a la calle a pasear y poder cruzar un semáforo que vivir rodeada de lujos. Un ejemplo: ayer colgué en Facebook una información muy valiosa sobre las bondades de darse baños de sal, como limpia pulmones, hígado y riñones. Bueno, pues las dos únicas personas que comentaron fue para decir que con esa bañera (la que aparecía en la foto) cualquiera se daba esos baños. Yo ni me había fijado en que había una foto con una bañera, me quedé en la información y el sentimiento de felicidad que me daría ese baño de sal. Me dio pena por esas personas que sólo pudieron sentir envidia por no tener esa maravillosa bañera, que lo era, en su casa.... Disfrutemos de lo que tenemos, por favor!!!? Gracias por compartir tus ideas y perdón por el rollo ��

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    1. Gracias por tu reflexión Marisa, efectivamente es habitual buscar la felicidad en los objetos y experiencias ajenos a nosotros, y la felicidad, aunque para cada uno es un término que tiene diferentes connotaciones, está en las pequeñas cosas, en momentos, que para muchos pasan desapercibidos, considero que no está en lo que tienes, sino en lo que eres y cómo te sientes de a gusto en tu piel.
      Mil gracias por compartir con nosotros tu reflexión.
      ¡Un abrazo gigante!
      Tamara

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